Hoy está muy guapo con esos vaqueros y esa camisa de color gris oscura.
Me encanta su forma de mirar y de hablar, te atiende cuando hablas y además es más claro que el imbécil.
Me gustaría que él supiera lo que me pasa por la cabeza cada vez que le veo y lo hiciese verdad. Por cuestiones de que no sé si hay algún menor leyendo este blog no voy a escribir lo que quiero que me haga.
No hay comentarios:
Publicar un comentario